Esta guía de los amores saludables fue un encargo para concienciar a la juventud sobre los mitos del amor romántico y saber así identificar cuando un amor es insano y una relación tóxica.
Mi idea para la portada era representar un amor libre sin especificar genero ni color de piel en la que la imagen transmitiera cariño pudiendo tratarse de una relación de amor o de amistad. Para ello, ilustré unas manos entrelazadas cuya sombra proyectada era la de un corazón, pero no una representación simbólica sino real.